Como entidad integrante del organismo internacional, adhiere al llamado a poner fin a la discriminación en los viajes causada por ciertas vacunas que no están siendo reconocidas en todo el mundo.
En una resolución de urgencia, la Asociación Médica Mundial (AMM) afirmó que los ciudadanos de algunos países están experimentando serias complicaciones al viajar ya que sus vacunas no son aceptadas como prueba de protección total. Muchos países aceptan solo un determinado conjunto de vacunas que se consideran una protección apropiada, mientras que otras vacunas no están reconocidas.
La Asociación expresó que esto está llevando a una discriminación efectiva contra los viajeros que han sido vacunados. Está restringiendo la cooperación y el comercio internacionales, lo que perjudica principalmente a los países y regiones más pobres. En algunos casos ha dado lugar a solicitudes de personas vacunadas de una tercera y cuarta dosis, esta vez de vacunas aceptadas por proporcionar el nivel de protección necesario.
La AMM ahora está pidiendo a todos los gobiernos que adapten de inmediato reglas justas, armonizadas y no discriminatorias para permitir oportunidades de viaje seguras e iguales, e informar al público, si preocupaciones serias sobre vacunas específicas que obstaculizan su aceptación.
La AMM comprende la renuencia de las autoridades farmacéuticas a permitir la introducción en el mercado de vacunas para las que no se ha solicitado autorización en su jurisdicción, o que aún están en proceso de autorización, o que pueden haber sido rechazadas debido a sus estándares éticos o técnicos de prueba o producción no cumplen con los requisitos establecidos.
Pero considera necesario evaluar las vacunas para el Covid-19 como una medida confiable de protección para viajes basándose únicamente en su efectividad contra la infección y la enfermedad grave por el SARS-CoV 2. En este momento hay suficientes datos para evaluar las vacunas en función de su efecto protector, independientemente de su autorización de comercialización. Si se considera que las vacunas no son efectivas y, por lo tanto, no son aceptables como protección, las razones de tal decisión deben hacerse públicas.