Nota publicada en Página 12: Mercado Pago entró al negocio de la salud
La billetera virtual de Mercado Pago añadió una herramienta para que los usuarios puedan acceder a coberturas médica, teleconsultas y otras necesidades. La plataforma de Marcos Galperin ahora permite teleconsultas médicas ilimitadas, acceso a psicólogos, nutricionistas y recetas electrónicas. Sin embargo, especialistas han advertido sobre la precarización del servicio, los riesgos de la banalización de las consultas médicas y la falta de regulación.
Recientemente, Mercado Pago anunció un nuevo servicio para sus usuarios: a partir de un acuerdo con la empresa de seguros Life Group, ofrecerá teleconsultas médicas y reintegros en medicamentos recetados mediante la contratación de un seguro de vida o de accidentes personales.
Según el comunicado oficial, Mercado Pago explicó que la propuesta apunta a captar a los sectores más vulnerables de la sociedad: “este servicio es una solución para las personas que, debido al contexto actual, tienen dificultades para acceder a servicios de salud”.
El servicio se llamaDr. Virtual y ofrece atención médica online con consultas ilimitadas las 24 horas, a través de distintos tipos de abonos mensuales que van desde 4.990 pesos hasta 26.000 pesos. Apuntando a los estratos sociales más vulnerables, el servicio ha recibido críticas por su “falta de regulación”, su banalización y el impacto “negativo” en la calidad del acto médico.
El servicio ya está disponible en la sección “Seguros y Asistencias” de la app de Mercado Pago y no requiere gastos adicionales, más allá de la suscripción mensual. Lo llamativo e innovador es que no se trata de una prepaga ni de una obra social, sino de un servicio privado de asistencia médica digital. Los influencers contratados para promocionar este servicio lo publicitan con los mismos métodos y en los mismos términos que a un champú contra la caída de pelo o una alarma doméstica. ¿Puede ser realmente equivalente tener una consulta con un psicólogo o con cualquier otro profesional de la salud, a al acto de cargar la SUBE o comprar un pack de medias?
Los especialistas advierten que la proliferación de servicios médico-asistenciales promovidos por plataformas financieras, como en este caso, no parece estar supervisada por autoridades sanitarias, lo que elude la responsabilidad ética y jurídica del acto médico.
Se trata de una asistencia médica digital de Mercado Pago, desarrollada en conjunto con DoctoRed, una empresa privada de salud. A través de la app, los usuarios pueden acceder a: consultas clínicas generales ilimitadas por videollamada disponibles las 24 horas todos los días; recetas electrónicas válidas en farmacias; turnos programados con psicólogos, nutricionistas y dermatólogos: una cartilla médica con 40.000 prestadores incluyendo instituciones reconocidas como Sanatorio de la Trinidad, CEMIC, Finocchietto y Stamboulian; y la posibilidad de compartir una consulta clínica mensual con otra persona sin necesidad de demostrar parentesco.
Aunque el servicio ha despertado polémica a nivel nacional y en varias provincias, desde el sector reconocen que el modelo de Dr. Virtual no es nuevo. En EE.UU., plataformas como Teladoc Health ofrecen servicios similares de salud digital con atención las 24 horas, recetas online y acceso a especialistas.
¿Qué preguntas despierta este nuevo servicio en relación a la desregulación y la banalización de las consultas médicas Jorge Iapichino, presidente de la Confederación Médica de la República Argentina (COMRA) dialogó con Página/12: “A priori vemos el asunto con bastante preocupación, porque, así como ha sido presentado, por lo menos parece que atender a un paciente es tan sencillo como ponerse un guardapolvo y decir que sos nutricionista”. ‘Tenemos un país federal y esto significa que tanto el Ministerio de Salud de la Nación como los ministerios de cada provincia regulan el ejercicio de los profesionales de la salud. No es que puede aparecer alguien y decir ‘soy dermatólogo’ y ponerse a atender a través de la pantalla. Existen controles de matrícula en cada provincia. En cada jurisdicción hay colegios médicos con sus códigos de ética y acuerdos correspondientes, que habilitan a ejercer la profesión y les dan un marco. Hay controles y regulaciones por las cuales no podés ejercer la medicina en lugares donde no tenés matrícula. En las provincias donde no hay colegios médicos, esas funciones quedan a cargo de los ministerios provinciales. ¿Quién va a controlar eso en estos casos?”, analiza Iapichino.
La postura de COMRA, según explica Ianpichino, es de incertidumbre: “Solo tenemos preguntas porque no se sabe cómo está llevando a cabo esto Mercado Libre y la empresa asociada. Ofrecen consultas ilimitadas por un precio ridículo, pero por lo menos hasta ahora no se sabe quién va a llevar adelante las consultas. Se pierde todo lo normatizado. ¿Van a ser profesionales autorizados y controlados por quién? ¿Las teleconsultas van a atravesar todas las jurisdicciones? ¿Quién va a ser el garante de la idoneidad y formación de los profesionales?”.
“Además, se pierde todo lo que tiene que ver con la relación entre el médico y el paciente, que es importante. La posibilidad de un seguimiento. ¿Va a haber una ficha de registro? ¿El médico va a ser alguien de la misma jurisdicción en la que vos estás? ¿Va a tener matrícula allí? ¿Podría ser de otra? ¿Podría ser un médico de otro país? ¿Quién va a controlar eso? A nosotros todo esto nos genera muchísimas preguntas”, comenta Ianpichino.
Ianpichino reconoce, sin embargo, que la telemedicina llegó para quedarse, y que la incertidumbre que genera esta novedad entre los profesionales de la salud es más ética que técnica: “La telemedicina es positiva. Se pierden cosas, pero también puede facilitar el acceso a una consulta a personas que viven alejadas de los centros de salud. Eso está muy bien. Pero esto es otra cosa. O parece serlo. Este lunes mismo, desde la Confederación, vamos a elevar una consulta al Ministerio de Salud para preguntar cuáles son las garantías y regulaciones en relación a este tipo de atención médica”, concluye.
